¿Le intriga el hurón, pero no sabe nada de esta mascota? En los últimos años se han vuelto cada vez más populares, gracias a su inteligencia y a su gran afecto por los humanos: ¡hay muchos mitos que disipar y cosas que aprender para su correcto manejo, con el fin de establecer una buena relación con ellos!
1 – Se llama hurón, pero en latín…
El nombre hurón es muy pegadizo: recuerda a algo fino, rápido y suave. Pero el nombre latino no es tan amable. Mustela putorius furo significa «marta ladrona maloliente», porque si está mal cuidado, el hurón puede robar comida y oler muy mal.
2 – No es un roedor
A menudo se confunde al hurón con un roedor por su tamaño: nada más equivocado. Es un mustélido, depredador y carnívoro. Lo más probable es que los roedores los aprecien como alimento.
Es muy importante entender que el hurón debe comer carne, a ser posible cruda, porque está en su naturaleza. De hecho, asimilan las proteínas como cualquier carnívoro y no pueden seguir en absoluto la dieta reservada a los roedores. Para disipar el mito de que la carne cruda los hace más agresivos, recuerda: no es la carne lo que los hace malos, sino la mala alimentación.
3 – No es un animal salvaje
Mucha gente piensa que es poco domesticable, ya que es un animal salvaje. Nada más equivocado: el hurón apareció en tiempos de los antiguos egipcios y desde entonces, al igual que los perros y los gatos, no puede vivir en la naturaleza, sino que depende del hombre.
De hecho, le encanta la compañía humana y no soporta la soledad: algo importante a tener en cuenta a la hora de incorporar un hurón a su familia.
4 – Es antialérgico y ama la limpieza
El hurón es un animal prácticamente antialérgico. Hay muy pocas personas que sean alérgicas al pelo del hurón, por lo que es un animal muy recomendado para los alérgicos a otros animales. Por supuesto, antes de tomar una muestra es mejor hacer las pruebas de alergia en cualquier caso.
A los hurones les encanta mantenerse limpios y hay que bañarlos, cepillarlos y cortarles las uñas: en resumen, hay que cuidarlos a fondo y constantemente.
5 – Le encanta jugar
Quien se convierte en padre adoptivo de un hurón sabe que hay que dedicarle tiempo para jugar y sacarlo a pasear. Además, con un poco de adiestramiento puede aprender a utilizar los aseos para gatos y entender su nombre cuando le llamas.
Son amantes absolutos de los juegos: los túneles, los puentes colgantes para saltar y las pelotas no pueden faltar en su casa.
6 – Les encanta dormir
El huron duerme muchas horas al día: esto no significa que esté enfermo, apático o aburrido. Simplemente lo necesita fisiológicamente. Son animales principalmente nocturnos, aunque varían su ritmo según su familia humana. Por supuesto, si se le mantiene en una jaula o se le deja solo durante largos periodos de tiempo, es posible que duerma más de lo debido, pero no le molestes innecesariamente si su vida transcurre sin problemas.
De hecho, un regalo fantástico para un hurón es una hamaca: ¡les encanta dormir suspendidos!
7 – No mantenga a su hurón en una jaula
Como hemos dicho en el punto anterior el hurón no puede vivir en una jaula. El hecho de que no ladre o maúlle para quejarse no significa que sea feliz. Puedes equiparte con una jaula muy grande, para los desplazamientos o para cerrarla en momentos puntuales o por la noche, pero la mejor solución es dejarla abierta para que pueda entrar y salir.
La jaula entonces la puedes equipar como una pequeña habitación y lo ideal es que esté dispuesta en varios pisos: aseo, comederos, hamaca para dormir, juguetes.
8 – Es extremadamente curioso
El hurón es un animal curioso: ¡muy curioso! Al igual que con los conejos, es fundamental asegurar la casa antes de su llegada o, si no toda la casa, al menos las habitaciones a las que tiene acceso.
Hay que evitar que se escape, porque no sabría volver a casa, pero sobre todo hay que evitar que haya cables sin cubrir para mordisquear y grietas en las que pueda quedarse atascado y hacerse mucho daño.
9 – Necesita cuidados veterinarios
Al igual que todos los animales que conviven con nosotros, los humanos, es importante que se realicen exámenes médicos. Debes llevarlo regularmente al veterinario para que lo revise y le ponga un microchip, recordando que debes elegir un veterinario experto en exóticos.
También debes tener cuidado porque los hurones pueden contraer la gripe de nosotros los humanos, así que ten cuidado cuando estés enfermo de no morderlos.
10 – ¡Puede adoptar en lugar de comprar!
Dada la escasez de información sobre los hurones y la moda lanzada por algunas películas de Hollywood (¿recuerdas la película «Y por fin llega Polly?») hay mucha gente que ha comprado impulsivamente un hurón y luego ha decidido deshacerse de él de diversas maneras.
Esta actitud es muy distante, por no decir paralela, a nuestra forma de vivir con los animales: ¡promovemos la adopción de hurones que buscan una familia consciente y que pueda amarlos como se merecen!