La natación se considera una terapia de rehabilitación para nosotros los humanos y se recomienda cada vez más. Una piscina de perros terapéuticos es lo que necesitamos en caso de que nuestros amigos peludos tengan un pequeño problema con la genética, la edad o la nutrición. Sin olvidar que a muchos perros les encanta lanzarse al agua: jugar, bañarse y nadar parecen ser momentos esenciales para ellos.

¿Por qué la piscina terapéutica para perros?

Es perfecto para enseñar a su perro a familiarizarse con el agua y superar este miedo, en cualquier época del año. Puede considerarse como un sustituto del paseo, ya que, además de divertir y cansar al perro, favorece un correcto desarrollo músculo-esquelético, ayudando a prevenir patologías articulares.

También está indicado, siempre bajo el consejo de su veterinario, para perros con problemas articulares como la displasia de cadera y para perros con sobrepeso, sin olvidar los perros de exposición que pueden aumentar su tono muscular para conseguir una forma perfecta.

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